miércoles, 27 de junio de 2007



Corre caminos...
Nos dijo que se llamaba Juan, pero nada más...mucho tiempo se le dijo así y de un día para otro dijo llamarse Sergio, jajaja
está pitiao este viejito amoroso de metro 50 y peso pluma, jajaja...
Muchos de estos personajes viven la vida sumergidos en su demencia. Muchos no quieren ver la realidad, la encuentran molesta, la encuentran injusta y demasiado preestablecida.
Es tan especial cuendo se refieren a uno con la típica frase: "con todo respeto señorita..."-y luego de conversar contigo te besan las manos con cariño y agracecimiento.
Ya no hay temores, ya no ha miedos hacia ellos, hay solo cariño y ganas de hacer un buen trabajo, ganas de darles palmaditas y tirarles tallas. Como cuando llegó "el pichirriqui"(Carlos Gomez) con la polera rasgada, lleno de piñén, el pelo tiezo y la ropa sucia...Angélica le dijo:"Pucha que andamoh encachao"-el solo reía y la abrazaba, jajaja...
Es una de las experiencias más bacanes de mi vida, algo que jamás olvidaré, algo que será único y que dentro de lo difícil encuentro felicidad y gratitud por el solo hecho de escuchar y querer, se siente el propio valor reflejado en los ojos.